martes, 26 de enero de 2010
Royal Bangs - Let it beep
lunes, 25 de enero de 2010
Cara B 25/01. Entrevista a Astrud
The Magnetic Fields - Realism
domingo, 24 de enero de 2010
Jesse Dee - Bittersweet batch
jueves, 21 de enero de 2010
La metalista del 2009
lunes, 18 de enero de 2010
¿Se le ha ido la olla a M.I.A.?
M.I.A. tiene un nuevo tema. Se llama "Space Odissey / There's space for ol dat i see" y es una frikadota en toda regla que demuestra que esta chicaa) ha estado fumando de todo menos tabacob) ha estado escuchando Animal Collective. Mucho.
Cara B 18/01. Blood Red Shoes
sábado, 16 de enero de 2010
PlasticPanic presenta a IcebEnd + Ciervo + Am Mut

No es tarea fácil definir lo que los chicos de IcebEnd hacen cuando se juntan en el estudio o sobre un escenario. Su rock emotivo se ha calificado en ocasiones de post-rock o emo-core, pero estas etiquetas se le quedan pequeñas a los incendiarios temas de su segundo disco Hyperventilation, con influencias que van desde la delicadeza de Jeff Buckley hasta la energía de At The Drive-In , pasando por las etapas más experimentales de Radiohead y la actitud subversiva del grunge de los noventa, con Pearl Jam como referente más claro. Ganadores del concurso Emergenza Acoustic, se ganaron también al público y jurado en el concurso Audiciones de la Fundación Canal de Isabell II y se ganaron seguro al público de este concierto, repasando los clásicos de su discografía y adelantando algunos temas de lo que va a ser su tercer álbum de estudio.
Los telonean Ciervo y Am Mut, ambos presentando su primer disco. En el caso de Ciervo, este primer LP se titula Aprendiendo a hablar y es un torrente controlado de guitarras progresivas, melodías vocales y juegos de intensidad, con una destreza que nos hace intuir que, aunque digan estar aprendiendo, Ciervo vienen con la lección más que aprendida.
Am Mut, por su parte, también estrenarán su debut, Gorgonae, una delicia instrumental de 3 partes que recoge y reinterpreta en sus 50 minutos lo mejor de la psicodelia, la música experimental y el rock progresivo, meciendo al oyente en sus pasajes más pausados y sacudiéndolo frenéticamente en sus momentos más turbulentos.
Esta noche, los 3 en BeCool, por sólo 7 euros. ¿Te los vas a perder?
Más info, aquí.
jueves, 14 de enero de 2010
Stephin Merritt: los restos del naufragio
Stephin Merritt ha vuelto a hacerlo. Su nuevo disco nada tiene que ver con “Distortion”, ni con “i”, ni con “69 love songs” ni tan siquiera con aquel “Distant Plastic Trees”. Merritt se ha sacado de la chistera su “álbum folk”, en el que reinventa por enésima vez el sonido de The Magnetic Fields. Quizá la pista se halle en el último tema del disco, “From a sinking boat”, una de sus muchas canciones sobre naufragios. Merritt me confiesa que a veces se siente como si hubiera naufragado y yo creo que lo hace aposta, para así poder resurgir con más fuerza.

Que Stephin Merritt es un tipo complicado no debería pillar a nadie por sorpresa. Dicen que no se siente cómodo en las entrevistas y que por eso resulta tan hosco. También se rumorea que tiene un problema de hiperacusia y que por eso manda callar y dejar de aplaudir a la gente en sus conciertos. Habla lento e imprime interminables pausas a sus frases. Vamos, que seguramente Merritt no sea un tipo con quien te irías de copas, pero eso no quita que sea uno de los mayores escritores de amor y desamor del pop de las dos últimas décadas y que se haya cascado un discazo como la copa de un pino.
“Realism” ha sido concebido como la otra cara de “Distorsion”. “Quería hacer un par de álbums, uno rock y otro folk, y llamarlos “True” y “False”. Pero como no sabía a cuál llamar “True” y a cuál “False”, cambié de idea y los titulé “Distortion” y “Realism”, aludiendo a su estilo de producción”. Una producción que Merritt buscaba premeditadamente acústica: “No quería que nada sonara eléctrico, quería que todo fuera orgánico. Y sin embargo usé un aparato de efectos para “The Dada Polka”: un simulador acústico, que hace que la guitarra eléctrica suene como una guitarra acústica. Pero está claro que no funcionó, ya que en la canción se sigue notando la eléctrica”. Probablemente “The Dada Polka” suene tan diferente al resto del álbum porque se escribió mucho antes, en 1986. Por aquel entonces, Merritt ya sabía que acabaría escribiendo en algún momento su “álbum folk”, como ha bautizado a este “Realism”. “Supongo que he tardado tanto en hacerlo porque es difícil. El folk requiere una grabación más extensiva, poniendo mucha atención a cómo van a sonar unos instrumentos al lado de otros. Mientras que con “Distortion” tardé sólo dos o tres semanas en grabar y un año y medio en mezclar el álbum, con “Realism” sólo el proceso de grabación ya me llevó un año y medio”.
Este álbum, el noveno de The Magnetic Fields, tiene como principal referencia el folk psicodélico y orquestal de finales de los 60 y principios de los 70. Merritt cita como discos más influyentes “In my life” y “Wildflowers” de Judy Collins. “Son álbumes folk pero beben de todo tipo de música. Hay mucha variación estilística y nunca se repite la instrumentación, pero sigue siendo folk”. Obviamente, Merritt no quería hacer el típico álbum folk, con guitarras, ukeleles y a correr, sino que buscaba un enfoque mucho más colorido y caleidoscópico, atreviéndose con chelos, violines, acordeones, tubas, banjos e incluso un tablá (tambor indio) y un buzuki (instrumento parecido a una mandolina). Eso sí, igual que “i” y “Distortion”, “Realism” carece de sintetizador, y es que éste es el álbum que cierra la “no-synth trilogy” de la banda. Y aunque es pronto para hablar de un próximo trabajo, Merritt me desvela que éste “volverá a tener sintetizadores. Seguro. Pero no serán el mismo tipo de sintetizadores y los usaré de maneras diferentes”.
A medida que la entrevista avanza, parece que Merritt se va relajando y se abre un poco más. Es entonces cuando me habla de su época como periodista musical en el Time Out New York y por qué lo dejó: “No me gustaba reseñar sólo cosas que me gustaban. Pero, por otro lado, cuando alguna vez decía lo que pensaba sobre un álbum que no me gustaba, luego siempre me acababa encontrando por ahí al artista en cuestión y estaba enfadadísimo conmigo”. Y es que ser criticado por Merritt debe de dar bastante miedo. Con todo, él mismo reconoce que “a veces haces una crítica negativa de un disco y más tarde cambias opinión, y te acaba gustando algo que anteriormente, cuando conocías menos al grupo, habías criticado”.
En cuanto a sus planes a corto plazo, los próximos meses pintan bastante ajetreados para el polifacético Merritt: estará trabajando en la música de una adaptación teatral de 20.000 leguas de viaje submarino de Julio Verne, para luego meterse de lleno en la gira de promoción de “Realism”, que empieza en febrero y de momento no incluye ninguna ciudad española. “Ojalá vayamos a Barcelona. Es, junto con Londres, una de las dos ciudades en las que más me gustaría vivir”.
Podéis encontrar este artículo en el número de enero de GoMag
miércoles, 13 de enero de 2010
Nicolai Dunger - Play

martes, 12 de enero de 2010
15 más para el Primavera Sound 2010
Yeasayer
Spoon
No Age
HEALTH
Fuck Buttons
Shellac
Ui
Cold Cave
Liquid Liquid
The Clean
The Big Pink
Standstill
Real Estate
Polvo
Atlas Sound
THE PSYCHIC PARAMOUNT
domingo, 10 de enero de 2010
Exsonvaldes - Near the edge of something beautiful
Al contrario de lo que uno esperaría, cuando a Exsonvaldes les preguntas acerca de su nombre, no mencionan la catástrofe del petrolero Exxon Valdez sino a la escritora Zoé Valdés. Esto ya dice mucho de su música, mucho más preocupada por la belleza que por la tragedia. “Near the edge of something beautiful” demuestra que Francia no sólo exporta rompepistas, sino que también son capaces de facturar grandes grupos de pop-rock.
Sin embargo, Exsonvaldes no rehúyen la electrónica. Sin ir más lejos, el propio Alex Firla (productor de Phoenix) le ha dado un toque electrónico a sus canciones sin romper el clima altamente emotivo del álbum. Esta atmósfera se ha creado principalmente a través de la adición de capas sonoras y el trabajo melódico de las guitarras. Bueno, y a través de la voz de Simon Beaudoux, claro. En su voz se oye el eco de una angustia adolescente a lo Brian Molko pero mitigada por la serenidad del paso del tiempo. Esto converge en algunos momentos dramáticos que recuerdan a Thom Yorke o Matt Bellamy sin llegar al histrionismo (“Near the edge of something beautiful”) y en otros más rabiosos de reminiscencia grunge (“Last year”). No es de extrañar, ya que si en algo coinciden los cuatro componentes de la banda, dentro de la disparidad de sus gustos, es en su devoción por Radiohead y por el “In utero” de Nirvana, que aún sigue sonando en la mayoría de sus viajes en furgoneta.
sábado, 9 de enero de 2010
Monsters of Folk no tienen nuevo álbum
viernes, 8 de enero de 2010
Editors: de la oscuridad a las tinieblas, y subiendo

Siempre que voy a una ciudad donde hace buen tiempo intento que hagamos las entrevistas en la calle. ¡Hace tan buen tiempo aquí en Barcelona! Me encanta.
De hecho, ‘In This Light And On This Evening’ dice “London’s become the most beautiful thing I’ve seen”, así que quería preguntarte, ¿cuáles son las ciudades más bonitas que has visitado o que te gustaría visitar?
Tengo la suerte de haber podido visitar la mayoría de lugares que he querido visitar. Y una de las que más me gusta es Tokio. Es una de las ciudades más impresionantes que hay, sobre todo de noche, con las luces rojas brillando sobre de los edificios altísimos... Es muy misteriosa. ¿Has visto Lost In Translation? Pues, aunque parezca un poco cliché, es exactamente así. Es un lugar maravilloso. Y, por otro lado, Barcelona lo tiene todo: un clima muy bueno, un casco antiguo fantástico, lugares interesantes que ver, la playa... Todo lo que uno podría querer en una ciudad.
Y qué prefieres, ¿Europa o Estados Unidos?
Creo que Europa. A ver, nos gusta ir a Estados Unidos a tocar. Siempre nos lo pasamos muy bien allí, los conciertos son geniales, especialmente en las ciudades más grandes: Seattle, Los Ángeles, San Francisco, Nueva York... También Chicago, probablemente mi ciudad favorita en los Estados Unidos. Tiene un aire antiguo, puedes sentir toda su historia, la mafia y todo eso...
Cambiando de tercio, me gustaría que habláramos sobre el giro que ha tomado vuestra música. Tom ha explicado en alguna ocasión que ha sido por vuestra propia salud mental, que ya no podíais volver a hacer un disco tradicional con guitarras. ¿Cómo es eso?
Bueno, en realidad lo intentamos. Escribimos canciones y nos surgían ideas bastante similares a las de “An End Has a Start”, pero acabábamos los ensayos aburridos y poco motivados. Así que nos dimos cuenta de que necesitábamos un tiempo, una distancia, para probar otras cosas, otros instrumentos, intentar componer de una manera diferente. Y entonces Chris y Tom empezaron a enseñarnos cosas basadas principalmente en sintetizadores, y eso nos abrió una nueva atmósfera: enseguida empezaron a salirnos un montón de cosas.
Y, de todas las direcciones que podríais haber tomado, ¿cómo os decidisteis por este tipo de música, electrónica, oscura y con sintetizadores?
Fue principalmente Chris, que decidió dejar de lado la guitarra porque sentía que todo lo que le salía se parecía a algo que ya habíamos hecho antes. Entonces empezó a trabajar con sintetizadores y, una vez teníamos ese sonido sintético, queríamos ir más allá: empezamos a usar voces procesadas por ordenador, baterías programadas... Queríamos usar el mínimo de instrumentos “de verdad” posibles.
Flood ha sido vuestro productor en “In this light and on this evening”. ¿Cuál ha sido su papel en este nuevo sonido de Editors?
Ciertamente, este nuevo cambio de dirección apunta a un sonido más industrial. Os pone más en la onda de estos artistas que mencionas o incluso de New order, y ya no tanto Joy Division o Interpol. ¿Han cambiado vuestras influencias para este álbum?
Más bien han crecido. Además, ya no nos inspiramos sólo en música, sino también mucho en el cine.
¿Terminator, por ejemplo?
Sí, exacto, ese tipo de cosas. Algo mucho más vasto. Y cuando componíamos para este disco, e incluso cuando estábamos grabando, pensábamos en imágenes. Como si fuera la banda sonora de esos fotogramas que teníamos en la cabeza. Y es una manera interesante de trabajar, porque de esa forma no te obligas a que la canción tenga una estructura fijada: un principio, un nudo y un final, y lo puedes interpretar de una manera diferente, moverte en diversas direcciones. En cualquier caso, sí, la gente nos seguirá comparando con grupos, es algo inevitable... Pero al menos nos comparan con grupos muy buenos, lo cual es genial.

Dentro de todos estos cambios, uno que creo que ha pasado más inadvertido es la ampliación de registro vocal de Tom. En algunas canciones, como por ejemplo ‘Eat Raw Meat’ se ha atrevido con un registro mucho más agudo al habitual en él. ¿Ha sido algo premeditado o sólo lo que cada canción necesitaba?
Creo que las dos cosas. Necesitaba forzarse a hacerlo, retarse a ampliar su registro. Y estoy muy orgulloso de él porque se ha convertido en un frontman mucho más seguro de sí mismo. Al principio le daba un poco de miedo, pero Flood le animó a hacerlo, incluso cuando Tom se sentía incómodo o fuera de su rango vocal o incluso ridículo, Flood le decía “eso es interesante” o “inténtalo, tú puedes”.
¿Cuál es tu canción favorita del álbum?
Bueno, es difícil elegir, porque me gusta mucho cómo funciona como álbum en conjunto. De hecho, es interesante porque en nuestra web tenemos una encuesta para saber la canción favorita de la gente, y no hay una ganadora clara. Normalmente siempre hay alguna canción que piensas que va a gustar más que el resto, pero en este álbum parece que todas están muy igualadas, y eso es un halago. En cualquier caso, mi canción favorita ahora mismo seguramente es ‘The Big Exit’. Me gusta mucho tocarla en directo.
Es una de mis favoritas también, junto con ‘Eat Raw Meat’.
Lo de ‘Eat Raw Meat’ es curioso porque la primera versión que hicimos no era ni la mitad de interesante que el resultado final. De hecho, estuvimos a punto de no meterla en el disco. Pero Flood nos dijo “escuchad esos acordes, escuchad ese gancho que tiene”. Y la desnudamos del todo y volvimos a empezar. Y así nos topamos con la actual manera de interpretarla, que realmente funciona. Y menos mal que la encontramos, porque probablemente es la canción más fuerte del álbum.
¿Dónde ves a Editors en diez años?
Emmmm... Estoy prácticamente seguro de que seguiremos haciendo discos. Eso espero. Quiero decir, no hay nada que me haga pensar que no lo estaremos. Nos lo pasamos bien, nos sentimos muy creativos ahora mismo. Queremos seguir haciendo giras y conociendo lugares maravillosos, y las giras se sustentan en buenos álbumes. Así que seguiremos ahí.
Esta entrevista es el artículo principal del número de enero de Inzona
Vuelve la muchachada!

jueves, 7 de enero de 2010
Mariah Carey, borracha revelación
Das Pop - Das Pop
Seis años han pasado desde que Das Pop nos conquistaron con su single “You”, tiempo suficiente para que esta banda belga haya caído en el olvido. Y mucho me temo que este álbum no va a ser el que los rescate de su condición de one-hit wonder.
Este álbum homónimo, el tercero de su carrera, es agradable pero fácilmente olvidable, de esos discos que no dudarías en ponerte de fondo mientras preparas la cena pero que difícilmente meterías en tu iPod, y eso que está producido por Soulwax y 2 Many Dj’s. No obstante, para ser justos, hay que reconocer que la segunda mitad del LP supone una mejora sustancial respecto a una primera parte que carece de ideas y sosifica el sonido Motown. Eso cambia en “Fool for love”, que recoge ese sonido y lo contrapone a unas guitarras angulosas. Acto seguido nos sorprenden con el inicio casi free-jazz de “Try Again”, para luego marcarse un pop clásico y sosegado a lo McCartney en “Let me in”, que nos deja con la guardia baja, indefensos frente a la inesperada distorsión de “Saturday Night (Part 2)”. Así sí.
Esta reseña la podéis encontrar en el número de enero de GoMag